BREVE HISTORIA

En 1899 el Gobernador D. José Rodrguez de Vera llevó a Santa Isabel la primera máquina de impresión, que sirvió para la confección del "folleto" conmemorativo de la colocación de la primera piedra de la Catedral. 

En 1901 sale por un corto tiempo, un periódico quincenal titulado "El Eco de Fernando Po". fundado por el Gobernador D. José de Ibarra y D. Enrique López Perea, pero eran muy difíciles aquellos días para que semejante empresa pudiera prosperar sin los recursos necesarios, así que solo llega a imprimirse hasta el número 7.

 Ese mismo año de  1901 el P. Armengol Coll trae de España otra máquina de imprimir, que sirve para trabajos de los Misioneros, es una  prensa adquirida en Barcelona en el Taller tipográfico de Cunill - lo propio que el material de tipos y demás era una máquina de presión cilíndrica con platina de 25 x 32 cm, y movimiento a manubrio de vaivén, de construcción muy sencilla y rudimentaria, ajena de mecanismos complicados. Se instala en la misión de  Banap, y su manejo era uno de los cuidados de la Escuela de Artes y Oficios,

Una vez extinguido " El Eco de Fernando Po",  fue arraigando la idea de una publicación periódica a cargo de la Misión, Sopesado todo, se pech con la empresa, y el 25 de Enero de 1903, se divulgaba un prospecto anunciador de la nueva publicación, que se titulara :

                 "LA GUINEA ESPAÑOLA"

Constará provisionalmente cuatro páginas y será quincenal: Su lema, fomentar los intereses religiosos, materiales, y morales de nuestra amada Colonia del Golfo de Guinea. Se dibujaban secciones, instructiva, descriptiva, amena, con modalidades y manifestaciones varias en cada una de ellas. Y hecho así el anuncio y la propaganda, se lanzó el número primero el 1 de Abril de 1903.

Muy pronto se palpó la insuficiencia de esta prensa, pues a más del tiraje de La Guinea Española, página a página, aparte se hubo de comenzar una serie de impresos, así como el deseo de ampliación de la revista a mayores dimensiones, los demás trabajos de la Misión y particulares, que gradualmente y por fuerza, siendo la única imprenta, afluían al taller, cada vez en mayor número. 

Por todo ello en 1904 se adquirió la prensa llamada "Montserrat, de presión también cilíndrica y de tamaño de platina de 35 X 48 cm, casi doble de la pequeña "Blas" y con transmisión a pedal y volante. Sus características de sencillez y ductilidad de manejo eran idénticas a la anterior, lo que permitió que los oficiales que la habían de manejar ya estuvieran familiarizados con ella. Desde 1094 ambas compartieron el trabajo, aumentado por la doble extensión que desde 1905 se dió a la revista, y las diversas oficinas del Estado que comenzaron a utilizar sus servicios, así en marzo de 1905 se empieza a publicar el "Boletn Oficial de los Territorios Españoles del Golfo de Guinea".

Aunque desde su aparición tuvo una gran aceptación en todo el tejido colonial, recibiendo múltiples felicitaciones, la revista había tenido ya sus primeros percances en aquel ambiente casero, donde la suprema autoridad casi alternaba con el ínfimo de los ciudadanos y su poder e influencia quería extenderla a todo. Pero el incidente más grave vivido por la naciente Revista ocurrió sobre marzo de 1905, después de año y medio, en pleno remozamiento de "La Guinea", que había comenzado a salir con doce grandes páginas y que le abocó a la supresión o suspensión indefinida del periódico. Acababa de llegar en febrero de ese año como Gobernador en su segunda etapa D. José Gómez de la Serna, movido por el letrado secretario del Gobierno, sobrino de Monteros Ros, cuyo parentesco liberal saltaba a los ojos, anticlerical, como se jactaba él mismo, tuvo la desacertada y desdichada idea de decretar e imponer la censura previa a la prensa periódica de la Colonia, 

Gobierno General de Fernando Poo y sus dependencias.

N. 578.

Por razones de orden político y de interés del Estado, he tenido a bien decretar lo siguiente: "Desde esta fecha queda sujeta a previa censura la prensa periódica de esta Colonia. La Secretaría de este Gobierno General queda encargada del cumplimiento de este decreto, del que se dar cuenta al Gobierno de Su Majestad."

Lo que tengo el gusto de comunicar a V. E, para su conocimiento y cumplimiento en lo que afecta al periódico de su digna dirección.

Dios guarde a V. R. muchos años. Santa Isabel 27 de abril de 1905.

José Gómez de la Serna.

Rdo. P. Joaquín Juanola, director de "La Guinea Espaola"

O  sea exclusivamente a "La Guinea". Esto dio lugar al forcejeo de actitudes que llevó a la suspensión indefinida.

Un año más tarde, con ocasión de la Boda del Rey, el mismo Gobernador queriendo realizar festejos y remover y orientar la opinión: creyó ser buena coyuntura para la reaparición de "La Guinea", y humildemente fue a pedírselo al P. Juanola, quien lo comunico al P. Vicario Apostólico el 25 de mayo de 1906, este a su vez lo comunicó a los Superiores mayores del Instituto que eran quien debían tratar el caso. El asunto se trató tanto por el Gobierno General del Instituto, como el particular de Guinea creyendo preciso ceder a tales presiones, acordando que se reanudase la publicación.

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